
Éste es el secreto de esta emprendedora.
La creación de Distroller fue fortuita. Tenía una pequeña empresa donde producía tarjetas para toda ocasión y las vendía en 35 tiendas diferentes. Desde pequeña le ha gustado pintar, dibujar e ilustrar y sin darse cuenta le comenzaron a pagar por esas actividades.
Tras un tiempo, la diseñadora se convenció de hacer un negocio y su primera inversión fue mínima: sólo $10 mil pesos para comprar un horno, donde hacia vajilla y así fue, en 1993 que se conocieron sus productos. Llego el momento en que sus conocidos le pedían artículos para sus amigos, motivo por el cual comenzó a cobrar su trabajo. Se unió con unas amigas que le ayudaron a administrar y organizar.
Además de las vajillas, comenzó a hacer bolos para bautizos y primeras comuniones, joyería, mesas, muebles.

Consejos de Amparo para los nuevos emprendedores:
· Toda la gente tiene buenas ideas, pero pocos las llevan a cabo, por eso, la tenacidad y la dedicación son fundamentales.
· Es imposible hacerlo todo uno mismo, por eso, es necesario apoyarse en los expertos.
· Se necesitan bases sólidas que sostengan al negocio, sobre todo si éste se quiere llevar más allá de las fronteras.
OTRAS FORMULAS DE ÉXITO
· Dejar fluir la creatividad sin permitir que otros le pongan un límite a nuestras ideas.
· Trabajar en algo que se convierta en el oxígeno y la pasión de la vida.
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